Liga Femenina

Siempre hubo en nuestra iglesia un grupo de mujeres que se reunían una vez por semana. Las personas han cambiado a través de los años, el tipo de reuniones ha cambiado, pero algunas mujeres siempre han sentido la necesidad de reunirse a parte fuera de la misa del domingo. Leemos una porción de la Biblia, servimos una comida sencilla, compartimos nuestras penas y alegrías, y oramos por nuestras necesidades, por nuestras familias, por nuestra iglesia.

Si te sientes sola, te faltan amigas, estás triste, la mejor terapia es la de un grupo que te puede escuchar, te puede aconsejar y consolar, porque nosotras tenemos alguien que nos escucha, nos aconseja y nos consuela: Nuestro Señor Jesús, nuestro Padre celestial, quien nos creó, y Su Espíritu, el gran Consolador.

Quizás tu casa está muy cerca de nosotras, de nuestra iglesia. Ven y ve, acompáñanos todos los lunes a las 5 de la tarde.

¡Te damos una cordial bienvenida!

 

 

Os aseguro que donde quiera que se predique la Buena Noticia, en el mundo entero, se hablará también de lo que esta mujer ha hecho, en su memoria… Mc 14,9